¿Estás buscando alternativas nuevas para disfrutar en la cama? Quizás es el momento perfecto para experimentar con el bondage y llevar tus encuentros sexuales a un nuevo terreno, en el que puedes llegar a descubrir cosas muy excitantes no solo de tu pareja, sino también de ti.
Lo primero que debes saber con respecto al bondage o las prácticas sadomaso, es que debe existir consentimiento y respeto mutuo, además de la capacidad de tomarse las cosas como una forma más de placer y de diversión, sin extralimitarse ni caer en los abusos.
Muchas veces, cuando se trata de practicar bondage de forma segura, la línea que separa el disfrute mutuo de las situaciones de dominación excesiva y maltrato es muy fina, así que como en cualquier relación sexual sana, es imprescindible dejar las normas claras desde el principio.
Cada uno de los involucrados debe decidir hasta qué punto está dispuesto a permitir, y es importante respetar a la pareja cuando esta expresa disconformidad ante alguna situación incómoda que surja durante el acto. Recuerda que todo el juego va dirigido a aumentar el placer y vivir una experiencia íntima más plena, no a incomodar a nadie o hacer que se sienta mal.
Una vez que las reglas generales se han establecido de forma clara, ha llegado el momento de seleccionar algunos de los mejores juguetes que puedes incorporar a tus encuentros para sacar el mayor partido al bondage.
Que comience el juego de dominación
La dinámica tiene lugar entre dos personas, una de ellas asumirá el rol de dominante y otra de sumisa, aunque hoy en día podemos encontrar hasta ocho roles diferentes en las dinámicas BDSM. Hay parejas que interpretan siempre el mismo rol, porque así lo han acordado desde el principio, mientras que otras intercambian posiciones llevando la experiencia al siguiente nivel.
Si ya has decidido que vas a implicarte al máximo en esta experiencia y que tu rol será el de amo o el de sumiso, debes deshacerte por completo de cualquier prejuicio, abrir tu mente, liberarte de complejos y de las ideas preconcebidas que tienes con respecto al sexo y lanzarte a disfrutar… ¡No lo lamentarás!
Un kit fetish para una noche inolvidable
Con un buen kit de juguetes para bondage lo tendrás todo preparado y no necesitarás una gran preparación para iniciarte en esta atrevida dinámica con tu pareja. Hay kits muy completos que suelen incluir correas y cuerdas para practicar nudos en las manos, brazos y piernas, accesorios para el cuello y vendas, con las que podrás cubrir los ojos de tu pareja o amordazarla. Recuerda no usar una fuerza excesiva cuando utilices algunos de estos juguetes, de esta forma evitarás los accidentes.
Columpio para puertas, lleva la sumisión a otro nivel
Recuerda que la sumisión es uno de los placenteros roles que te ofrece el bondage, así que no dudes en obtener el máximo de ella. Parte del uso de algunos juguetes consiste en inmovilizar a la otra persona durante el encuentro, una dinámica que puede excitar enormemente tanto a la persona que domina, como al que interpreta el rol de sumiso.
Este columpio, que puedes colgar en la puerta, es un objeto que te llevará a descubrir posturas y experiencias que nunca imaginaste. No solo ofrece la posibilidad de mantener en una posición elevada a tu pareja, sino que también está equipado con arneses con los que experimentar las posibilidades más excitantes y osadas.
Correas para la cama
El bondage y sus juguetes no serían lo mismo sin este clásico accesorio. De hecho, dentro de todas las prácticas que puedes llegar a experimentar, esta es una de las más comunes. Podrás atar de pies y de manos a tu pareja de forma totalmente segura, inmovilizarla y descubrir las fascinantes opciones que te ofrece esta posición.
Acompaña la sumisión de tu pareja con plumas para hacerle cosquillas o caricias muy estimulantes. También puedes hacerlo con otros artículos sexuales que estimulen los genitales, o con una buena sesión con el látigo o el fuete. ¡No imaginas todo el placer que una escena como esta puede provocar en ambos!
Correas para la sumisión total
Si estás buscando nuevas experiencias más extremas, las correas de sumisión total que se ajustan al cuello e inmovilizan las manos son un elemento verdaderamente placentero para la práctica de la asfixia erótica. Algunas de ellas incluyen una bola que se introduce en la boca y que sirve de mordaza. ¡La experiencia puede ser sencillamente estremecedora!
Infligir dolor en su justa medida
En el bondage también es muy frecuente jugar con el dolor físico, siempre sin extralimitarse, respetando los límites como hemos indicado al comienzo de este artículo y cuando exista un acuerdo previo. Para ello, existen pinzas creadas especialmente para los pezones, que además puedes usar también en los pliegues vaginales e incluso en algunas zonas de los genitales masculinos.
El diseño que presentan es sumamente excitante y se encuentra recubierto por una goma suave para que el dolor sea moderado, no se produzcan lesiones y cuentes con la toda la seguridad a la hora de incorporar este juguete a tus sesiones de bondage. ¿Te atreves a probarlo?