Todos nosotros conocemos la existencia del Kamasutra. Este famoso manual sobre las artes amatorias fue escrito en algún año por determinar entre los siglos III y VI por el monje y escritor hindú Vatsiaiana. Aunque es frecuente asociar este libro a un catálogo de posturas sexuales, lo cierto es que su contenido es mucho más extenso. A lo largo de un total de 36 capítulos, el autor trata toda clase de temas relacionados con el sexo y las relaciones; sobre la seducción, el papel del sexo en la vida de los hombres o el propio acto sexual. Pero, sin duda, la parte más atractiva y famosa de este libro es la dedicada a las posturas sexuales pues, pese a lo lejano en el tiempo de su primera publicación, estas siguen siendo todo un referente para toda clase de amantes modernos.
La lista de posturas del kamasutra originales es muy variada, tanto que lo más probable es que muchas de ellas os suenen y las hayáis llegado a practicar. Se trata de un catálogo muy completo, perfecto para quienes quieran innovar y probar nuevas sensaciones sexuales entre las que no se descartan prácticas como el annilingus o beso negro, el sexo anal o el beso de Singapur. A continuación, os ofrecemos una selección de algunas de las mejores posturas del Kamasutra.
Las posturas tradicionales
La silla caliente
Esta es una postura que se practica de rodillas. El hombre arrodillado recibe a la mujer de espaldas posicionando sus piernas sobre las de él. Una vez que la penetración se haya llevado a cabo, el hombre debe rodear con sus brazos la cintura de ella mientras ella con sus manos es libre de hacer y tocar lo que desee. Una vez entrados en materia, podéis moveos hacia arriba y hacia abajo o realizar movimientos circulares con la cadera. Cualquiera de estos dos movimientos os asegurará un máximo placer. Una vertiente alternativa de esta postura puede realizarse cambiando la posición arrodillada por otra similar si se lleva a cabo sentados al borde de la cama.
La Araña
Esta es una de las posturas del Kamasutra más populares. Para llevarla a cabo, los dos debéis tumbaros boca arriba en la cama con las piernas enfrentadas y los brazos echados hacia atrás. Luego, con las rodillas levantadas y los pies planos sobre la cama, las caderas de ella deberán introducirse entre las piernas de él hasta lograr una penetración profunda y estimulante que se complementará con continuos movimientos balanceantes hacia adelante y hacia atrás. Gracias a esta postura se consigue una gran penetración. Lo ideal es que aquí sea la mujer la que maneje las riendas.
El Trono del Rey
Esta es una famosa postura de sexo oral en la que, en principio, el hombre es el principal beneficiado. Ella se tumba de espaldas a la cama con la cabeza apoyada sobre una almohada. A continuación, él se sienta sobre sus hombros e introduce el pene en su boca a la vez que imita suavemente los movimientos clásicos del coito. Una ventaja de esta posición es que es reversible, con el hombre tumbado en la cama y la mujer sentada sobre su cara.
Las posturas más complejas
La cascada
Entramos ahora en el terreno de las posturas de ejecución compleja, pero que reportan grandes dosis de satisfacción para ambos miembros de la pareja. La posición es la siguiente: el hombre ha de tumbarse con la nuca y los hombros apoyados en el suelo mientras sus glúteos y piernas permanecen sobre la cama. De esta guisa, ella debe montarse a horcajadas, ya sea arrodillada con las piernas sobre la cama o sentada en el borde de la misma. Sea como sea, esta postura tiene varias ventajas. Por un lado permite una penetración profunda y, por otro, garantiza al hombre un orgasmo superior como causa de la sangre acumulada en la cabeza.
El 69
Todo un clásico para los amantes del sexo oral y una de las posturas del Kamasutra más extendidas. La ventaja del 69 es que ambos reciben y dan placer ya que tanto el pene como la vagina permanecen en todo momento en contacto con la boca del otro. La postura clásica manda que él se tumbe de espaldas sobre la cama y sea ella la que coloque su sexo sobre su cara a la vez que, inclinándose hacia delante, pueda estimular con la boca y manos el pene, testículos y perineo de él. Existe una variedad que requiere dosis de fuerza física en la que él, de pie, sujeta a la mujer que, invertida, rodea con sus piernas el cuello de él. Como experiencia conjunta puede ser realmente completa si se consigue llegar al orgasmo al mismo tiempo.
La Fusión
Esta técnica parte de la posición de la araña pero, una vez realizada la penetración, ella deberá colocar las piernas sobre los hombros de él. De esta manera, su trasero se encuentra en una posición más elevada que estimula una mejor y más profunda penetración facilitando además la capacidad de empuje. Gracias a esta postura, las mujeres podéis lograr orgasmos más rápidos.
La Carretilla
¿Alguna vez habéis conducido una carretilla? Pues esta posición reproduce de manera más o menos fiel esta acción. La mujer ha de colocarse “a cuatro patas” mientras el hombre, situándose detrás suyo, la agarra por los tobillos o las piernas elevándolas hasta que estas, en suspenso, quedan pegadas a las de él favoreciendo en último lugar la penetración. Por el esfuerzo que requiere, se trata de una postura que exige una buena forma física en ella, pero que sin duda reporta grandes beneficios.
La X
Para realizar esta posición, ambos debéis sentaros en la cama frente a frente. A continuación, la pierna derecha de él ha de situarse por encima de la izquierda de ella mientras la izquierda de ella se coloca sobre la derecha de él. Así, adoptando una posición similar a una “x” debéis acercaros poco a poco hasta que se produzca la penetración y comenzar entonces con movimientos lentos que pueden ir acelerándose poco a poco. Un truco muy efectivo es darse las manos para mejorar el agarre y poder empujar de manera más fuerte.