Cuando al fin te das cuenta de que te gusta alguien, empiezas a ocupar tu tiempo pensando en él y en posibles estrategias para llamar su atención. Sin embargo, a pesar de todos tus esfuerzos, a veces no puedes obviar que no te hace mucho caso. Y tal vez no tenga que ver con que no se sienta atraído hacia ti sino que, simplemente, no estés causándole interés.
A veces, nuestra manera de seducir a otras personas suele ser un sistema de acoso y derribo sin dejar tiempo para respirar, lo que puede provocar que se alejen de nosotros. Y es que, en esta primera fase de juegos y tonteos previos al enamoramiento, gestionar los tiempos es vital. Sí, existen distintas maneras de seducir a un hombre, pero una de las claves de este juego es precisamente poner algo de distancia y demostrarle que no te tiene en sus manos. Si sabe que puede contar contigo cuando él quiera, si siente que tiene el control de la situación, se aburrirá. A los hombres les gustan los retos, sentir que son capaces de superar las dificultades. Por eso es importante que sepas gestionar los tiempos; para demostrarle (y demostrarte) que eres una mujer autónoma, segura de ti misma y que no necesitas a nadie para ser feliz (pero que, aún así, tienes interés en él).
La seducción es una etapa muy divertida, precisamente por este juego de fuerzas que se establece entre él y tú. Por eso, para que disfrutes de ella y puedas poner en práctica esto que comentamos, aquí va una lista sobre cuándo y cómo ignorarle para que sea él quien te busque.
Cuándo ignorar a un hombre
1. Al recibir un mensaje
Sí, en plena era de las comunicaciones digitales estamos acostumbrados a intercambiar mensajes e interactuar en redes sociales a todas horas sin ningún tipo de filtro, lo que nos lleva a pensar que uno tiene que estar conectado al teléfono 24/7. Pero, ¿realmente es necesario vivir como si cualquier notificación fuese una urgencia? No, por supuesto que no.
Cuando intentes seducir a un hombre es importante que no contestes sus mensajes al instante. Esto te hará parecer necesitada, le hará creer que estás atenta al teléfono solo para poder hablar con él, dejando a un lado tu vida. Si te das un tiempo antes de responder verá que eres una mujer ocupada, que eres trabajadora y/o que sabes disfrutar de tu tiempo de ocio sin necesidad de estar pegada a una pantalla. Esto provocará un mayor interés en él, pues hará que él sea quien busque la manera de llamar tu atención.
También puedes probar a jugar con los tiempos. Unas veces puedes escribirle al momento, lo que puede llevar a una interesante y sugerente conversación digital. Otras veces puedes dejar sus mensajes esperando y contestarle cuando te apetezca, haciendo que sea él quien esté esperando tus respuestas.
2. Al iniciar conversación
Dar conversación es básico cuando estás conociendo a una persona. Es la forma de conectar, de conoceros mejor, de seduciros y de atraeros. Pero no es bueno que seas tú la que abra tema de conversación siempre. Él podría acostumbrarse e incluso relajarse, dejando que seas tú la que lleve las riendas siempre, lo que demostraría su poco interés. Es mejor dar tiempo.
Si estáis en contacto permanente a lo largo del día, ya sea a través de internet o cara a cara, os veréis forzados a tener un diálogo perpetuo en el que poco a poco tendréis que inventaros nuevos temas de conversación. Sin embargo, si dejas tiempo antes de contestar a sus mensajes (o de iniciar una nueva conversación) estás dejando espacio para que él tenga ganas de hablar contigo, para que tenga cosas nuevas que contarte e incluso para que sea él quien fuerce los temas de conversación. Para ello puedes, por ejemplo, dejar conversaciones abiertas al irte a la cama que os permitan retomarlo donde lo dejasteis sin la presión de tener que empezar desde cero.
3. Si te pide salir
Por supuesto, uno de los momentos clave para ignorar a un hombre cuando quieres seducirlo es cuando te llama proponiéndote algún plan y tú ya habías quedado. No puedes estar siempre dispuesta a dejarlo todo para irte con él porque pensará que, te llame cuando te llame, vas a estar disponible para él, lo que puede llevar a una situación o de desinterés o de control. Si no habíais quedado, tú habías hecho tus planes y él te llama inesperadamente, no dejes lo que tenías pensado hacer, ya tendrás tiempo otro día para verle.
Esto no es solo bueno para ti, ya que te permite mantener tu individualidad. También le probará a él que eres una mujer activa, que tienes amigos, aficiones y vida más allá de él, lo que no hará otra cosa que provocarle más interés.
4. Si otras personas intentan ligar contigo
¿Conoces esta historia de que no valoras algo hasta que lo pierdes? Pues este punto va un poco de eso. Si estáis en un acto social y alguien se acerca a ti con intenciones de ligar, es mejor que no te apartes en busca del chico que te gusta. Esta es una forma de decirle que ya te tiene y que, por tanto, no hay posibilidad de que te pierda. Cuando esto pase, es mejor que intentes mantener una conversación amigable y pasarlo bien porque, quién sabe, tal vez ganes un amigo.
Y es que no te olvides que aún os estáis conociendo, aún estáis seduciéndoos y jugando. Si ve que cuando intentan ligarte no solo no te apartas sino que das conversación, verá que tú sigues dispuesta a conocer a nuevas personas y, por tanto, se dará cuenta de que puede perderte, lo que le obligará a dar un paso. Tal vez intente sumarse a la conversación o quizás intente llamar tu atención desde la distancia pero, sin duda, si su interés es real, hará su movimiento.
En resumen
Recuerda que ignorarle forma parte de este juego de la seducción. Lo que conseguirás con esta estrategia es mantenerle atento, conseguir que sus ganas de conocerte y su interés no decaigan. Con estos consejos harás que él no pueda dar nada por hecho y que se inviertan los papeles tradicionales, siendo él quien tendrá que ir a buscarte. No tengas miedo, esto forma parte de lo que conocemos como psicología inversa, una técnica que está más que probada en contextos amorosos. Conviértete en un reto, atrévete a probar estos consejos y verás que pronto él tendrá más y más ganas de estar contigo.
