Los músculos no tienen distinción de género. Así lo aseguran algunos especialistas en salud íntima y en terapias sexuales, así que del mismo modo en que las mujeres se les sugiere con frecuencia cuidar del fortalecimiento de su suelo pélvico, los hombres también podrían dedicar unos minutos al día a la misma rutina.
Los ejercicios Kegel fueron propuestos por primera vez en el año 1948 por el ginecólogo americano Arnold Kegel. En ese momento, sus recomendaciones acerca de sutiles contracciones que involucran el suelo pélvico, estaban dirigidas muy especialmente a ayudar a las mujeres a contrarrestar los efectos de la incontinencia después de dar a luz.
Desde ese momento, hasta ahora, se ha vinculado a los ejercicios de Kegel como algo que está únicamente dirigido a las mujeres y hoy en día podemos saber que no hay nada más falso que esto.
En la actualidad sabemos que esta rutina también puede ser aplicada en ellos. Los ejercicios Kegel para hombre son parte del proceso de recuperación después de una intervención quirúrgica en el periné o la próstata.
Ahora bien: ¿pueden estos ejercicios hacer más placentera tu vida sexual y ayudarte a disfrutar al máximo de los encuentros íntimos? La respuesta es sí, pero no solo eso… ¡Funciona de maravilla tanto en ellas como en ellos!
Los ejercicios de Kegel para la mujer
Sí, puede que los ejercicios de Kegel sean muy oportunos para contener la micción, por ejemplo, o para manejar mejor los problemas de incontinencia, pero esto no es lo único que las contracciones sucesivas del suelo pélvico podrían hacer por ti.
Un orgasmo femenino dura alrededor de 20 segundos. A lo largo de ese tiempo, el canal vaginal atraviesa una serie de contracciones muy placenteras que además se extienden al ano, al vientre y al abdomen, causando una sensación sumamente agradable y satisfactoria.
Estas contracciones ocurren de un modo involuntario, pero son sumamente útiles para masajear el miembro de tu pareja, en caso de que se trate de un encuentro íntimo con penetración. A mayor intensidad de estas contracciones, que ocurren cada 0.08 segundos aproximadamente, mayor será el disfrute de ambos.
Una buena manera de comprobar cuán intensas son tus contracciones durante el orgasmo, es experimentar con la penetración con los dedos mientras te masturbas. Descubrirás personalmente aquello que describimos y sabrás además cómo puedes sacarle provecho a esto.
También hay juguetes sexuales y otros dispositivos, como las pesas vaginales o las bolas chinas que están especialmente concebidos para ayudar a la mujer a fortalecer su suelo pélvico y a controlar, de un modo más consciente, la forma en la que se contrae la vagina durante el sexo.
¿Cuál es el propósito de esto? Hacer que los genitales femeninos sean mucho más participativos durante el encuentro sexual, en lugar de actuar únicamente como un órgano pasivo que recibe.
Si te haces consciente de estos movimientos y además los entrenas con frecuencia, podrías llegar a provocarle muchísimo placer a tu pareja, masajeando, comprimiendo y estimulando su miembro durante la penetración de un modo impresionante.
¿Cómo puede el hombre sacarle provecho a los ejercicios de Kegel?
Ya hemos dejado muy claro que la tabla ejercicios Kegel no es solo para mujeres. Los hombres también le pueden sacar mucho provecho a esto, pero en el caso de ellos, antes de comenzar con este “entrenamiento” del suelo pélvico, es aconsejable contar con la asesoría de un especialista.
¿Por qué es importante tomar esta precaución? Principalmente por la posible existencia de problemas o irregularidades con la próstata. Así como los ejercicios de Kegel en la mujer se pueden convertir en un aliado sexual muy poderoso, en los hombres podemos ver resultados igualmente favorables.
Los ejercicios de Kegel ayudan a los varones con su erección, además de con la duración de la misma. Gracias a esta terapia es posible obtener erecciones mucho más firmes, placenteras, durante un poco más de tiempo.
Dependiendo de la condición de cada individuo, así como de su salud sexual, las sesiones variarán de duración y de periodicidad.
¿Cómo es posible llevar a cabo estos ejercicios?
Algunos sexólogos o especialistas en salud íntima recomiendan empezar cuanto antes con los ejercicios de Kegel. En el caso de las mujeres, son sumamente sencillos. Bastará con estar sentada o acostada, relajada y preferiblemente con la vejiga vacía.
Se trata de contraer los músculos del suelo pélvico durante 3 o 5 segundos, después relajarlos durante la misma cantidad de tiempo y volver con las contracciones. Sentirás de inmediato cómo se oprimen un poco tus genitales.
De igual manera podrías contraer y soltar en movimientos breves y consecutivos durante al menos una decena de veces. Como comentamos anteriormente, también hay artefactos que te ayudarán a medir la fortaleza de tu suelo pélvico, así como a mejorarla.
El ejercitador de suelo pélvico es excelente para ellas, de esa forma no solo podrás contar con una condición vaginal más que saludable, también podrás sacar de esta práctica mucho provecho cuando se trate de encuentros sexuales más intensos.
