Uno de los aspectos más complejos del sexo es la eyaculación femenina. Aunque poco a poco se hable más del squirt, la otra manera de nombrarla, muchas mujeres siguen considerando que no son capaces de hacerlo. Sin embargo, como todo en el sexo, es cuestión de práctica conseguir que la mujer eyacule. Para ello aquí va una guía con 10 consejos sobre cómo estimular a una mujer y conseguir que se corra a chorros.
Calentamiento
No es bueno echar toda la leña al fuego sin haber prendido la llama antes. Si quieres ver a tu chica chorreando lo mejor es empezar poco a poco, lamiendo las distintas zonas erógenas del cuerpo.
Posición
Para la eyaculación femenina es recomendable utilizar las manos por lo que debéis encontrar una posición adecuada y cómoda. Lo ideal es una postura horizontal en la que tu pareja pueda abrir bien las piernas.
Estimula el clítoris
Antes de penetrar en la vagina es preferible estimular previamente el clítoris con los dedos para que ella empiece a lubricar y a disfrutar. Esto favorecerá su relajación y también le ayudará a alcanzar el orgasmo.
Estimula el punto G
Cuando la vagina esté bien lubricada es el momento de penetrar con los dedos (a ser posible el índice, el corazón o ambos) colocando la palma hacia arriba y estimular el punto G, ubicado en la próstata femenina a pocos centímetros en la pared vaginal. Aquí no se trata de jugar a mete-saca. Lo mejor es curvar ligeramente los dedos y estimular el punto G haciendo un movimiento conocido como “ven aquí”.
Mantén el ritmo
No basta solo con penetrar la vagina y estimular el punto G. Si quieres conseguir que eyacule a chorros tienes que mantener el ritmo e ir estimulando a la vez el clítoris. Para ello, puedes pedirle a tu pareja que sea ella la que juegue con su clítoris, ayudando una vez más a liberar la mente y disfrutar.
El orgasmo
Es posible que antes de llegar a la eyaculación ella tenga uno o varios orgasmos. Es normal, la mayoría de los orgasmos de mujeres son clitorianos y es un paso más en el camino al squirt.
No contenerse
Cuando tu chica esté cerca de correrse puede sentir que le están entrando ganas de orinar. Es clave que no se contenga en este momento ya que el líquido de la eyaculación se expulsa por la uretra, el mismo lugar que la orina.
Mantén la concentración
Siguiendo el punto anterior, es importante que si tu chica ha llegado al orgasmo o piensa que tiene ganas de miccionar no perdáis ninguno de los dos la concentración. Conseguir que ella se corra será complicado las primeras veces y estar centrado en lo que estáis haciendo es la mejor manera de alcanzar vuestro objetivo.
Levantar las caderas
Cuando se unan todas estas sensaciones y estímulos y creáis que está cerca de eyacular, una buena manera de propiciarlo es que ella levante las caderas y apriete las nalgas ejercitando los músculos pélvicos.
Relajación
Ya lo habéis conseguido, tu chica se ha corrido. Ahora es momento de dejar que ella se relaje ya que la vagina y el clítoris estarán muy sensibles tras la eyaculación. De nuevo la posición horizontal es perfecta ya que podrá quedarse tumbada disfrutando de todas las sensaciones que recorren su cuerpo.
Ya lo hemos dicho. Las primeras veces que intentéis que ella se corra será complicado, por eso es importante no obsesionarse con eyaculaciones enormes e ir poco a poco. Si no lo conseguís a la primera no pasa nada, volvedlo a intentar y disfrutad de todo el proceso. Recuerda que, aunque ella no se corra, es posible que experimente varios orgasmos en el camino a la eyaculación.